Sobre los estrechos y vacíos senderos,
Entre selváticos árboles
Con rechonchas ramas y miles hojas,
Se entreveía un verdusco y polvoriento puente;
Y, a su lado, una cruz comida por el tiempo,
Recordando a los que el cielo demandaba
[…] en su día.
Y, justo como un gato audaz,
-Entre malas hierbas y silvestres flores-,
Pisaba los mismos pasos- los pasos del pasado,
Cuando aún no conocía la tristeza,
Cuando oía el revoloteo de las mariposas,
O el mágico canto del grillo
[…] acompañándome eternamente.